El Maratón femenino del Mundial de Atletismo de Tokio fue a la antigua (bueno, el masculino también lo será), esto porque la World Athletics, organizadores del certamen, decidieron que la tanto la partida como la meta se hicieran dentro del estadio olímpico de Tokio, algo que en los Juegos Olímpicos no se hace desde Beejing 2008 y en los mundiales desde el 2015 en la misma ciudad. Volver a lo hecho hace muchos años, eso sí, no logró sortear las duras condiciones climáticas que tuvo la prueba, con 28° grados a las 7:30, hora de la partida y una humedad que de verdad y viendo las imágenes, parecía que estuvieran corriendo en el Caribe. Sin ir más lejos, y de seguro por las condiciones adversas, fueron 10 las deportistas que en los resultados aparecen como DNF.
Susanna Sullivan de Estados Unidos decidió tomar la delantera antes del medio maratón y escaparse con varios metros de distancia sobre sus más cercanas rivales. Aquí existían varios caminos: o podía mantener por más de 21 kilómetros el tranco y ser 1°, o producto de la exigencia abandonaba, o la pillaban pero terminaba la carrera. Lo último pasó, porque la keniata Peres Jepchirchir y la etíope Tigst Assefa la alcanzaron en los 28K comenzando así una pelea metro a metro para alcanzar la victoria entre las africanas. La medalla de oro se definiría entre ellas dos, convirtiéndose también en una entretenida disputa qué iba a pasar con la medalla de bronce.
Y no se dieron tregua, porque con tan solo 2 segundos de distancia Peres Jepchirchir logró quedarse con la medalla de oro con 2h24:43 siendo así la segunda mujer en la historia en alcanzar la gloria tanto en el Mundial de Atletismo como en los Juegos Olímpicos (lo hizo en Tokio 2020). La primera en lograrlo fue la portuguesa Rosa Mota quien primero fue medalla de oro en el Mundial de Roma 1987 y al año siguiente sería la más rápida en la cita olímpica de Seúl 1988. Assefa, quien en Londres en abril pasado fue WR en 42K de mujeres corriendo sin pacers ni hombres a la par (2h15:50) terminó en 2h24:45 siendo medalla de plata, la misma que obtuvo el año pasado en París.
La gran sorpresa fue la uruguaya Julia Paternain, quien con 2h27:23 fue medalla de bronce siendo la primera sudamericana en obtener una presea en los 42K del mundial de atletismo. Julia a fin de mes cumplirá 26 años y en Tokio corrió su segundo maratón. Debutó en marzo de este 2025 en Nueva York (no el major), en una prueba pensada para clasificar al mundial, con 2h27:09 (récord de Uruguay y en su primer maratón). Paternain, que de paso está subiendo como espuma su cantidad de seguidores en Instagram (@juliapaternain_), vive en Arizona.
Sullivan fue 4° con 2h28:16.
Por Chile estuvo corriendo Nicole Urra, terminando en la 59° ubicación con 2h58:05 entre las 63 finalistas.