Bien podría haber sido el remate de una carrera de 100 metros, de 800, 5 mil e incluso 10 mil. Pero no, era el final del maratón masculino que se definió por photofinish, algo muy inusual en el maratón donde han habido remates ajustados, pero muy rara vez definido por 0,03 segundos. Así fue el final del Maratón masculino del Mundial de Atletismo que tuvo como ganador al tanzano Alphonce Simbu con 2h09:48, superando sólo porque su pecho cruzó antes la meta al alemán Amanal Petros quien hizo 2h09:48. Pero a diferencia de las mujeres, donde la pelea por el oro fue entre dos, en los hombres al llegar al estadio olímpico donde estaba la meta eran tres los que disputaban metro a metro el primer lugar. Finalmente, Iliass Aouani de Italia llegó tan solo 5 segundos detrás siendo bronce con 2h09:53.
Al igual que la carrera femenina realizada un día antes, el clima definitivamente no fue el mejor aleado para los 88 maratonistas que comenzaron la prueba. A pesar de empezar a las 7:30 de la mañana, los termómetros marcaban sobre los 25 grados y una humedad que bien parecía estar corriendo en Rio de Janeiro. De hecho, hubo 22 DNF.
Pero algo diferente que hubo con la carrera de mujeres fue lo compacto que estuvo el grupo de avanzada. En los 40 kilómetros eran 6 los que pasaron en un rango de sólo 2 segundos, desgranándose recién unos metros antes de la entrada del estadio olímpico donde volvió a ubicarse la meta como en antaño. Incluso, los 10 primeros de la general llegaron en 60 segundos.
Quien estaba corriendo en busca del bicampeonato era el ugandés Victor Kiplangat, quien terminó 15° con 2h11:33.